Curso de Educación emocional
Detalles del curso
Mediante este Desafío, aprenderás a trabajar la inteligencia emocional de forma transversal, aprovechando las actividades y propuestas relacionadas con algún contenido curricular concreto, para realizar actividades claramente enfocadas a trabajar este tipo de habilidades emocionales (además de aprovechar para trabajar, a través de ellas, otros tipos de contenido).
Algunos ejemplos de tipologías de actividades que aprenderás a trabajar son: Actividades de identificación, actividades que fomentan las habilidades sociales, actividades que fomenten la escucha activa, actividades de expresión de sentimientos y actividades que fomenten la resolución pacífica de conflictos.
La inteligencia emocional es un término creado por Peter Salovey y John Mayer (psicólogos de la Universidad de Yale) y difundida por el psicólogo, filósofo y periodista Daniel Goleman que se podría definir, de manera muy resumida, como la capacidad de sentir, entender, controlar y modificar los estados de ánimo propios y de los demás.
Así pues, según Daniel Goleman, la inteligencia emocional nos permite tomar conciencia de nuestras emociones, comprender los sentimientos de los demás, tolerar las presiones y frustraciones que soportamos, acentuar nuestra capacidad de trabajar en equipo, adoptar una actitud empática y social y participar, deliberar y convivir en un ambiente armónico.
Para tratar de conceptualizar la inteligencia emocional podemos fijarnos también en la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, en el que se mencionan las inteligencias interpersonal e intrapersonal. A través del fomento y el desarrollo de estas dos inteligencias podemos dotar a los alumnos de habilidades como la empatía, la asertividad, el autocontrol, etc … que forman parte de la inteligencia emocional.
La inteligencia emocional se materializa en cinco habilidades prácticas:
- Control Emocional.
- Autoconciencia.
- Automotivación (y capacidad de motivar a los demás).
- Empatía.
- Habilidades sociales.